Recuerdo que cuando era niño y veraneaba por Teroleja, si algo era realmente importante era la bicicleta. Recuerdo que para ir de casa de tal a casa de cual, no dudábamos en coger la bici y pedalear hasta llegar a nuestro destino. Recuerdo que la bici de cada uno era ese vehículo que nos relacionaba con "los mayores" y jugábamos a simular el tráfico de la ciudad dando vueltas desde la plaza hasta "la cuesta del Felix". Recuerdo "maquear" nuestra bici poniéndole en los radios cachos de tubo de la bombona de butano, como si fuera un coche. Recuerdo que contra más marchas tenía la bici de uno, más clase tenía. Cuantos recuerdos, y los que se quedan por el camino...

Tantos recuerdos del pasado que nunca habría imaginado que se iban a convertir en futuro. Ahora la bicicleta se ha convertido en un medio de transporte más. Ahora hay más adultos con bici que niños. Se crean empresas de alquiler de bicis como medio para moverse por la ciudad, como si de un autobús se tratara. Se idean las nuevas ciudades con espacios para bicicletas. La gente va al trabajo o a estudiar en bicicleta. Vamos que, si a mi me dicen de niño que esto iba a pasar, me hubiera dado un ataque de risa.
Antes, que se pensaba en el futuro en naves voladoras, coches a lo Delorian, tráfico aéreo, etc, y ahora cambiamos todo eso con un ambiente verde y lleno de bicicletas. Sin humos, ni ruidos. Sin atascos ni estrés.
La verdad que todavía estamos empezando. Lo digo porque sé de primera mano lo que ya ha estado pasando en Europa con respecto a la bicicleta. Y digo que ojala se imponga lo que he visto en el extranjero, pero todavía queda mucho.
En Teroleja ya existen muchos concienciados, y esperemos que seamos cada vez más. Me incluyo, porque aunque no soy usuario total de la bicicleta, voy cogiéndole el gustillo a pedalear. Algún día daré el gran paso, y espero que todos poco a poco.
Me gustaría que esos recuerdos se convirtieran en futuro.

Tantos recuerdos del pasado que nunca habría imaginado que se iban a convertir en futuro. Ahora la bicicleta se ha convertido en un medio de transporte más. Ahora hay más adultos con bici que niños. Se crean empresas de alquiler de bicis como medio para moverse por la ciudad, como si de un autobús se tratara. Se idean las nuevas ciudades con espacios para bicicletas. La gente va al trabajo o a estudiar en bicicleta. Vamos que, si a mi me dicen de niño que esto iba a pasar, me hubiera dado un ataque de risa.
Antes, que se pensaba en el futuro en naves voladoras, coches a lo Delorian, tráfico aéreo, etc, y ahora cambiamos todo eso con un ambiente verde y lleno de bicicletas. Sin humos, ni ruidos. Sin atascos ni estrés.
La verdad que todavía estamos empezando. Lo digo porque sé de primera mano lo que ya ha estado pasando en Europa con respecto a la bicicleta. Y digo que ojala se imponga lo que he visto en el extranjero, pero todavía queda mucho.
En Teroleja ya existen muchos concienciados, y esperemos que seamos cada vez más. Me incluyo, porque aunque no soy usuario total de la bicicleta, voy cogiéndole el gustillo a pedalear. Algún día daré el gran paso, y espero que todos poco a poco.
Me gustaría que esos recuerdos se convirtieran en futuro.
Chencho